martes, 23 de febrero de 2010

Como es afuera es por dentro…

Mucho escuchamos hablar en estos últimos tiempos acerca de que lo que vemos afuera es lo que tenemos por dentro… y cuando comenzamos a ver nuestro contexto, nuestra realidad exterior, nuestra experiencia, quedamos más que sorprendidos, muy preocupados por saber cómo es que eso que estamos viendo, viviendo, observando día a día, lo tengamos nosotros por dentro, sobre todo cuando fijamos nuestra atención a los indicadores que describen la vida que actualmente llevamos la gran mayoría de los habitantes del planeta…

En realidad, a lo que se quiere hacer referencia con esto es que somos “responsables”, somos responsables de lo que acontece en nuestra vida individual y colectiva, el cómo decidimos vivir la vida y la interacción que decidamos en un momento establecer con la otredad, con nosotros, con la naturaleza, la humanidad y todo aquello con lo que compartimos este espacio común, este ecosistema al que pertenecemos todos!...

Desde que nacemos comenzamos un viaje de interacción y creación de nuestro destino, y ya desde muy tempranito apenas comenzamos hablar y aún sin poder hacerlo, ya estamos creando realidades!. Así, nos maravilla como logra un bebé ser atendido cuando lo necesita, ser consentido, ser amado, el sabe desde muy chiquitito crear su realidad y así cada uno de nosotros va creando a través del tiempo las realidades que nos van saliendo al paso… somos producto hoy de las acciones que ejecutamos en el pasado, de esas declaraciones favorables o no que hicimos en un momento determinado de nuestra vida y que quedaron fijadas en nuestra memoria y se constituyeron en nuestros patrones de comportamiento, pensamiento, sentimiento… lo que llamamos nuestros “paradigmas” y que los tenemos dentro…

Sin embargo, saber esto no es lo más importante… es bello, sí, saber que somos seres humanos creadores, pero lo más importante es saber cuál es el grado de conciencia y compromiso con el que estamos creando realidades…Cómo es qué eso que esta afuera lo hemos venido creando a través del tiempo con nuestras acciones, que han estado embuidas en nuestros paradigmas de pensamiento, sentimiento y comportamiento operando en nosotros de manera transparente y con un nivel de conciencia muy bajo y conduciendonos individual y colectivamente a lo que estamos viviendo ahora.

Ahora por estos tiempos, comenzamos a ver nuestro mundo y nos damos cuenta de todo lo que hemos hecho a favor y en contra de la humanidad, de los pueblos, de la tierra y hasta de nosotros mismos… si es cierto que hemos progresado, que hemos alcanzado altos niveles de sofisticación para un mejor vivir, pero la pregunta que me surge en este instante es ¿A qué precio???... cuando observamos un mundo plagado de miseria y pobreza, de conflictos y amenazas de guerra, de inseguridad y violabilidad de derechos humanos, de catástrofes naturales… Me pregunto ¿es la tierra un sitio apto para la vida y para bien vivir? o más bien ¿Un sitio para mal vivir y morir? ¿Qué hemos hecho o que hemos dejado de hacer para tener lo que estamos viendo y viviendo ahora?...

Lo cierto es que hemos estado creando cosas que han hecho que los resultados que tengamos sean los que estamos viendo… y de eso somos absolutamente responsables todos! Bien por decisión o bien por omisión…Ahora bien, el cuento no deja de ser casi que el mismo cuando nos toca revisar nuestra experiencia de vida individual…Las mismas preguntas me las he hecho cuando observo mi vivencia ¿Cuáles han sido mis declaraciones pasadas que me han traido como resultado lo que tengo ahora? ¿Cuáles han sido los paradigmas que me han movido? ¿Cuál es la realidad que estoy creando? ¿Qué hice en el pasado? ¿Con cuánto nivel de conciencia he producido esta realidad que hoy vivo? ¿Qué necesito hacer para generar una realidad diferente para el futuro?... me ha resultado dificil aceptar que todo lo que esta afuera de alguna manera esta adentro…y ahora comienzo a sentir la gran necesidad de invertir algunas cosas… para producir una realidad más consona a mis deseos y lo que quiero que se manifieste afuera… Deseo un mundo de paz, un mundo habitable, una naturaleza disponible para todos…Deseo una vida tranquila, llena de amor, sueños y esperanza, logros compartidos, bienaventuranzas, fe en que todo lo que deseamos a bien nos llega… sé que para comenzar a ver un mundo diferente es necesario comenzar a crear un mundo interior también diferente! Guiado más por la conciencia, por la observación aguda de nuestras acciones y el impacto que ellas puedan tener en el futuro nuestro y de la humanidad!!…

domingo, 21 de febrero de 2010

Amarnos con los ojos abiertos…

Hoy quiero compartir con ustedes un texto de Bucay que me gusto mucho y el cual parafrasee y añadí mis propias ideas, producto de mi experiencia…

La felicidad instántanea no existe, solemos endosarle al vínculo de pareja este deseo motivado a la ilusión surgida durante el enamoramiento…Cuando uno se enamora no ve al otro en su totalidad, sino que el otro funciona como un espejo donde nos proyectamos…

Los sentimientos a diferencia de las pasiones son más duraderos, estos están sostenidos en la percepción de la realidad externa, mientras que las pasiones son más desbordantes e ilusorias, y contienen al enamoramiento; el amor esta basado más en los sentimientos. “La construcción del amor comienza cuando podemos ver al que tenemos al frente, cuando descubrimos al otro”. Es allí cuando el amor reemplaza al enamoramiento o se funden en uno solo.

Pasada la fase de enamoramiento, comienzan a salir de nosotros nuestras peores partes, partes que además proyectamos en el otro. “Amar a alguien es el desafío de deshacer aquellas proyecciones para relacionarnos verdaderamente con el otro”. Este es el proceso más dificil y donde quizas muchas relaciones se pierden, pues se requiere entereza para aceptar que mucho de lo que le cargamos al otro, no son sino nuestras propias características, debilidades e imperfecciones!... sin embargo no deja de ser un proceso hermoso cuando se abre en ambas direcciones… nosotros y el otro.

Podemos hablar de amor cuando lo que nos importa es el bienestar del otro. “El amor como el bienestar que invade cuerpo y alma y que se afianza cuando puedo ver al otro sin querer cambiarlo”. Aceptándolo tal como es, como se muestra… Más importante que la manera de ser del otro, importa el bienestar que sentimos a su lado y su bienestar al lado nuestro. “El placer de estar con alguien que se ocupa de que estemos bien, que percibe lo que necesitamos y disfruta al dárnoslo, eso hace al amor”.

Como dice Bucay, “Una pareja es más que una decisión, es algo que ocurre cuando nos sentimos unidos a otro de una manera diferente. Podríamos decir que desde el placer de estar con otro tomamos la decisión de compartir gran parte de nuestra vida con esa persona y descubrimos el gusto de estar juntos”. Aunque sabemos que encontrar un compañero de camino no es suficiente, pues, también va a hacer falta que esta persona sea capaz de nutrirnos y hacernos crecer…

Yo pensaba que amar en una persona su potencial, por lo que podía llegar a ser alguna vez era una locura, una ilusión que crea nuestra mente, y hoy encuentro que el verdadero amor existe cuando amamos a alguien por lo que sabemos que esa persona puede llegar a ser, no solo por lo que es. Descubro entonces que he amado del otro hasta lo que ese otro aún no había sido y aún más por lo que estaba segura tenía dentro de si y aún no podía expresar…

"El enamoramiento es más bien una relación en la cual la otra persona no es en realidad reconocida como verdaderamente otra, sino más bien sentida e interpretada como si fuera un doble de uno mismo,… en el enamoramiento hay un yo me amo al verme reflejado en ti”.

Por eso es que amarnos con los ojos abiertos es distinguir lo que es nuestro de lo que es del otro y no proyectar sobre el lo que nos corresponde, por un lado, y por el otro, aceptar que el otro es como puede ser y que es distinto de nosotros y ama como puede hacerlo…

Hoy descubro lo tanto que amo y distingo claramente que: Enamorarse es amar las coincidencias, y amar es enamorarse de las diferencias…

viernes, 19 de febrero de 2010

Busquemos un amante…

Hace poco me reuní con una amiga, una de esas con las que una se sienta y habla de los aconteceres de la vida, de manera plácida y grata… Ella me refería que para aliviar el dolor, la tristeza, el sufrimiento era bueno buscarse un amante que nos ayudará a salir de esos espacios en los que a veces nos encontramos atrapados… recordé entre tantas cosas que he leído los escritos de Jorge Bucay…

El nos dice que existen personas que tienen un amante y que hay otras que quisieran tenerlo; también están las que no lo tienen y otras que lo tenían y lo perdieron… Lo cierto es que no contar con un amante en la vida, nos hace sentir a veces inmsonio, falta de voluntad, pesimismo, crisis de llanto… y tristeza, mucha tristeza que en palabras más o palabras menos nos hace ser personas verdaderamente desesperanzadas…

Dice Bucay que la vida de estas personas transcurre de manera monótona y sin expectativas, que trabajan nada más que para subsistir y que no saben en que otra cosa ocupar su tiempo, por lo tanto su tiempo se va, transcurre, porque no saben que otra cosa más hacer… Por esta razón, en estos últimos tiempos he venido pensando en este sentido, entre muchas otras cosas, que es bueno aprender a trabajar para vivir y no a vivir para trabajar solamente!… muy sútil esta frase, pero cuanto nos cuesta a veces ponerla en práctica…

Algo sucede en nuestra vida cuando somos colocados en situaciones en las que nos toca vivirnos el tiempo de una manera diferente… es entonces cuando enfrentamos ese espacio de darnos cuenta de que algo tenemos que hacer, pues, el tiempo adquiere un matiz, un significado distinto y hay que aprovecharlo con sentido y con propósito, para evitar caer en depresiones profundas que pueden paralizarnos y hasta quitarnos la vida.

En este sentido Bucay nos dice entonces que busquemos un amante, normal o virtual, pero sí!… un amante con el que ocupemos nuestro tiempo. Un amante según este autor es “Lo que nos apasiona”, lo que ocupa nuestros pensamientos antes de quedarnos dormidos y es también quien a veces, no nos deja dormir.

Nuestro amante es lo que nos vuelve distraídos frente al entorno, lo que nos deja saber que la vida tiene motivación y sentido. A veces nuestro amante lo encontramos en nuestra pareja, en otros casos en alguien que no lo es.

También solemos hallarlo en la investigación científica, en la literatura, en la política, en el deporte, en el trabajo cuando es vocacional, en la necesidad de trascender espiritualmente, en la amistad, la buena mesa, en el estudio o en el obsesivo placer de un hobby…

En fin es “alguien” o “algo” que nos pone de “novio o novia con la vida” y nos aparta del triste destino de vegetar…

Con todo esto no hay nada más que pensar al respecto, tengamos siempre un amante, esta es la mejor manera de vivir, de llenar el tiempo, de tener sentido y propósito… dejemos que la pasión nos inunde y que nos mueva!!!


lunes, 15 de febrero de 2010

La alquimia del alma … ¿cómo es que la podemos hacer?

Cuándo hablamos de alquimia, nos trasladamos necesariamente a ese punto de la historia de la ciencia en el que se combinaron elementos de varias disciplinas que explican de alguna manera lo que hoy llamamos transmutación y transformación, por lo tanto es un término que puede ser acotado en muchos ámbitos… El dominio en el cual hoy estoy motivada a escribirles producto de mi vivencia, es sobre la alquimia del alma y cómo nos ocurre… tal vez pueda servirles como referencia en su vivir…

Cuando estamos despiertos de conciencia, miramos la vida con ojos diferentes, nuestras vivencias se encargan de hacernos despertar del letargo de condicionamientos en el que hemos crecido y nos colocan a veces, en esos espacios en el que parece que nacemos de nuevo para el mundo, ese espacio en el que nuestras respuestas dejan de ser las mismas, producto de la reflexión y el aprendizaje que obtenemos al observar- nos y asumirnos de manera consciente y responsable.

Cuando llegamos a observar agudamente nuestros comportamientos son muchas las cosas en las que caemos en cuenta… tanto, que es inevitable y casi seguro que entremos en conflicto con nosotros mismos. A veces nos asusta mirarnos, desnudar el alma frente a nuestros ojos como que si fueran ellos un espejo es algo a lo que tememos, por eso se dice que hacer eso es un acto de valentía, pues no todos somos capaces de hacerlo….tenemos miedo de ver lo que hay del otro lado de nosotros.

Al principio libramos una batalla con negaciones y justificaciones sobre lo que hacemos y quienes somos, no queremos escuchar ni mucho menos aceptar que dentro de nosotros tenemos también a las tinieblas, la oscuridad, la maldad conviviendo con nosotros y haciendo de las suyas… hacemos de todo para convencernos de que somos absolutamente buenos y que son los demás los que atentan con su maldad en nuestra contra!

Pero como tenemos voces internas, a veces alguna de ellas nos hace eco… y esa nos hace dudar de nuestra absoluta bondad, o razón…Es allí cuando comienza el principio de la alquimia a dar sus pasos…Noche y día vamos al espacio experiencial a observarnos y darnos cuenta cómo es que estamos actuando, cómo estamos haciendo y sobre todo cómo es que estamos siendo…

En muchos momentos la confusión aparece liberando angustia en nosotros, angustia por no saber cómo es que tenemos que ser, hacer o actuar, la duda se apodera de quienes somos…es allí cuando nos encontramos irremediablemente en la nada, en el vacio, a solas con nosotros, desnudos en el infierno viendo, sintiendo, percibiendo en su máxima expresión toda nuestra oscuridad, nuestras tinieblas, nuestra falta de luz, nuestra falta de poder… allí estamos totalmente vulnerables y desasistidos!

Una vez en ese espacio, algo es necesario hacer para salir del trance…Si, es necesario aceptar, aceptarnos tal cual, aceptar que lo que estamos viendo es nuestro también… y aceptarlo significa abrazar con compasión eso que vemos y no cuestionarlo, no enjuiciarlo… solo aceptarlo…

Otra cosa importante es saber que lo que vemos en el trance, son nuestros egos traducidos en: emociones llamadas negativas, pensamientos adversos que producen reacciones y sentimientos incómodos, sufirimientos; producto de nuestra experiencia y que nos ocurren para algo… Así mismo es necesario saber que si entramos en ese trance es porque estamos en un proceso de transformación en el que la vida nos pone para renacer, y trasmutar cosas en nosotros, es cumplir con la alquimia en nosotros… es para escoger vivir de otra manera… es una oportunidad!

Otra cosa que debemos considerar es que lo que surge en esa oscuridad no va a desaparecer nunca… siempre estará con nosotros va a acompañarnos durante toda nuestra existencia, solo que ahora tenemos más conciencia de ello y podemos no ser victima de eso, sino más bien ser nosotros los que elegimos conscientemente como nos vamos a vivir eso que surge de nosotros cada vez que aparezca: nuestra oscuridad.

Finalmente despues del proceso lo que queda es una gran lección aprendida, un nivel de madurez y de comprensión altísimo, una capacidad de decidir y elegir con conciencia también altos, resultamos más dueños de nosotros mismos con un conocimiento de si mismos potenciado, nuestro poder personal se incrementa, por lo tanto la seguridad, la confianza y los valores se consolidan… comenzamos a vivir más en equilibrio buscando los puntos medios y evitando los extremos generando bienestar, amamos más intensamente todo, abrazamos a la vida, disfrutamos de más libertad… definitivamente comenzamos a vivir más plenamente!

Derivemos de lo dicho los pasos para generar alquimia en nosotros y producir las transformaciones y cambios que estamos necesitando en nuestra vida. Vayamos al infierno a quemar nuestra osuridad y generemos alquimia en nosotros, transformemos nuestras tinieblas en luz!

sábado, 13 de febrero de 2010

La muerte viene a visitarnos con un fin...


El ser humano generalmente conceptualiza la muerte de una manera atemorizante, la asocia al fin de la existencia, dice Carlos Castaneda en su obra “Las enseñanzas de Don Juan”…”Se nos entrena desde muy pequeños para olvidar que vamos a morir. Ese olvido naturalmente alivia parte de nuestro aprendido miedo a lo desconocido, pero nos cobra el altísimo precio de hacernos tambien olvidar la naturaleza mágica de la vida”...

… Morir es finalizar, acabar, terminar algo… si , es cierto, significa el termino, el fin de algo, que puede ser la vida o no, puede ser el termino de un ciclo, una fase, una etapa… en la que necesariamente no es la vida lo que se pierde, puede ser un trabajo, las relaciones, un amor, el tiempo, un espacio, una condición, una cualidad… son tantas las cosas que pueden morir y que de hecho mueren en un instante que no nos damos cuenta de que la llevamos a nuestras espaldas, de que convivimos con ella…

Todos los días al ocultarse el sol en el ocaso, muere; al levantarnos y al llegar la tarde una parte del día ha muerto; el amor es dinámico, por lo tanto si no se regenera con cosas nuevas que le impriman dinamismo, se pierde y muere; así mismo una relación que deja de alimentarse en la convivencia, también muere, porque dejan de ocurrir las recurrencias y los acoplamientos se debilitan y esta desaparece la muerte se la lleva; la condición física de un cuerpo sano a medida que pasa el tiempo pierde cualidades, estas mueren; una casa a la que no se le da calor humano, con el tiempo se cae, se derrumba, desaparece, muere; algunas maneras de hacer pierden vigencia y entran en desuso, su práctica muere, al cumplir una nueva edad cada niño, cada joven, cada uno de nosotros ha dejado atrás una parte que ha muerto para dar origen a los nuevos seres en los que nos vamos constituyendo día a día… entonces, como olvidar lo único que es seguro en nuestra vida, si una parte de nosotros y de las cosas esta muriendo constantemente día tras día y la otra esta naciendo a la vida, sin darnos cuenta, pues creemos que nacemos solo una vez…

Si bien es cierto que la muerte la llevamos en nuestras espaldas, no es menos cierto que la vida esta latente en cada uno de nosotros todos los días! Por eso hoy pienso que la muerte viene todos los días a mi, para recordarme que si quiero que algo diferente suceda en mi vida es necesario tomar las acciones y decisiones hoy, porque cada día que pasa es una oportunidad que muere que se pierde y a lo mejor hoy es el único día que tengo para hacerlo; viene para recordarme que el único tiempo que tengo para tocar, acariciar y encontrarse es un hoy y que de cualquier manera será breve; viene para recordarme que es perder el tiempo de la vida juzgar y criticar de manera vacía, sin ninguna utilidad; que hoy es la única oportunidad que tenemos para admirar la belleza y aprender a verla desde lo positivo pues nosotros podemos hacerlo, en relación a aquel que jamás podrá verla; la muerte viene para recordarme que defenderme ante los supuestos ataques de otros es perder el tiempo, es desaprovechar la inmensa oportunidad de permitir que aparezca ante nosotros nuestra divinidad, para vivirnos la vida sin sentimientos de odio, rencor, venganza, ofensa y mezquindades varias; vino a recordarme que no es necesario preocuparme por cosas que pudieran ser para nosotros pequeñas o grandes y que puedan llevarme al punto de la depresión y la angustia, pues esto le resta a mi bienvivir… definitivamente la muerte me esta recordando todos los días que en algún momento soy yo la que va a morir, por eso estar viviendo conscientemente, aquí y ahora es un gran desafío… El desafío, como dice Carlos Castaneda “El desafío de beberse el tuétano de la vida en cada instante. El desafío de vivir tan digna e impecablemente su momento como su poder se lo permita. Un mortal disfruta y saborea el valor de cada momento precioso, porque sabe con toda certeza que la muerte lo acecha y que su cita con ella habrá de cumplirse sin lugar a dudas”…!!!



martes, 9 de febrero de 2010

Una metáfora para reflexionar acerca del emocionar, los valores y la espiritualidad

LA METÁFORA DE LOS LOBOS

Un indio cherokee de cabellos plateados hablaba con sus nietos para instruirles en el arte de la vida. El anciano les dice:

"En mi interior se está librando una batalla. Una batalla terrible, es una lucha entre dos lobos. Uno de ellos representa el miedo, la avaricia, el odio, la agresividad, la envidia, el orgullo, la victimización, el resentimiento, la culpa, la inferioridad, la arrogancia, el engaño, la superioridad y el egoísmo.

El otro lobo representa la paz, el amor, la amabilidad, la alegría, la verdad, la compasión, la humildad, la transparencia, la autenticidad, la amistad, el respeto, la integridad, la benevolencia, la generosidad, la fe, la capacidad de compartir, la serenidad y la empatía.

La misma lucha está teniendo lugar dentro de vosotros y dentro de las demás personas también."

Los niños se quedaron reflexionando durante un rato. Y después una niñita le preguntó al abuelo: "¿Y qué lobo ganará?".

El viejo indio cherokee guardó un largo silencio. Y finalmente se limitó a decir: "Aquel al que deis de comer".

Esta metáfora tradicional india sirve para preguntarnos qué lobo está ganando en nosotros

Es importante preguntarnos además, ¿qué es lo que nos hace ser como un lobo o como otro? ¿Cuál es el estado emocional que nos conduce a ser de una manera o de otra? ¿Podemos elegir en ser de una manera o de otra ¿ o ¿estamos arrojados a ser según las circunstancias? ¿Es malo o es bueno ser como un lobo o como el otro? ¿A qué nos conduce ser de una manera o de otra? ¿Cuáles beneficios podemos obtener siendo de una manera o de otra? ¿Cuál es el mundo de posibilidades que se puede abrir o cerrar ante nosotros siendo de una manera o de otra? ¿En qué medida albergamos más en nosotros a un lobo o al otro?

Son muchas y variables las respuestas que podemos dar para reflexionar, sin embargo a mi me gustaría compartir lo que esta metáfora me puso a pensar…
Las emociones son todas necesarias para la vida, de hecho forman parte de la vida, le imprimen color a nuestra existencia... Pero lo más importante de las emociones es cómo nos las vivimos, si permitimos que nos hagan ser seres reactivos o si elegimos cómo queremos experimentarlas. Para esto último es necesario que observemos cómo fluyen ellas en nosotros, si las dejamos fluir sin represión, si las vivimos de manera extrema, o si podemos vivirlas de manera equilibrada... , las emociones no son ni buenas ni malas, ni positivas ni negativas, ellas son válidas todas, lo que tenemos que pensar es en los resultados a los que nos conducen , los efectos que nos pueden generar vivirnoslas de una manera o de otra y en el tipo de ser humano que devenimos producto de nuestro emocionar. Nos convertimos en seres humanos éticos, con valores. He allí la gran obra, el trabajo del ser humano para desarrollar estados de paz, libertad, felicidad y espiritualidad.

sábado, 6 de febrero de 2010

Acerca de la vergüenza y la culpa

Sentir "vergüenza " o "culpa" no es problema cuando las experimentamos de manera positiva, una dosis de vergüenza y culpa es necesaria para la vida saludable... el problema estriba cuando estos sentimientos se viven en el extremo y se convierten en un comportamiento recurrente que nos atrapa y nos ahoga... algo así como una especie de espiral repetitiva y continua enfermiza. La vergüenza se refiere al fracaso de una persona para poder ser, mientras que la culpa apunta a una falla en el hacer... la primera puede resultar más dificil de curar que la segunda... Otra diferencia importante es que las personas con sentimientos de vergüenza generalmente se preocupan por sus deficiencias, mientras que las que se sienten culpables se fijan en sus transgresiones. Otra diferencia entre vergüenza y culpa estriba en que la persona con vergüenza teme el abandono, mientras que el culpable le teme al castigo... Importante es saber como podemos sanar estas emociones cuando las vivimos en el extremo, cuando se han vuelto un patrón que nos limita y no nos permite ser libres y felices! Por lo pronto una sugerencia sencilla para iniciar el trabajo personal con la vergüenza es hacer declaraciones positivas acerca de nosotros mismos, estas declaraciones deberán estar seguidas de acciones que permitan experimentar en quien siente vergüenza tranquilidad y más libertad... para los que se sienten culpables la sugerencia es hacerse la pregunta ¿Pude haber hecho otra cosa en lugar de lo que hice, de acuerdo a lo que pensaba y el cómo me sentía en el momento? Las respuestas nos permitiran experimentar una sensación de liberación...