lunes, 15 de febrero de 2010

La alquimia del alma … ¿cómo es que la podemos hacer?

Cuándo hablamos de alquimia, nos trasladamos necesariamente a ese punto de la historia de la ciencia en el que se combinaron elementos de varias disciplinas que explican de alguna manera lo que hoy llamamos transmutación y transformación, por lo tanto es un término que puede ser acotado en muchos ámbitos… El dominio en el cual hoy estoy motivada a escribirles producto de mi vivencia, es sobre la alquimia del alma y cómo nos ocurre… tal vez pueda servirles como referencia en su vivir…

Cuando estamos despiertos de conciencia, miramos la vida con ojos diferentes, nuestras vivencias se encargan de hacernos despertar del letargo de condicionamientos en el que hemos crecido y nos colocan a veces, en esos espacios en el que parece que nacemos de nuevo para el mundo, ese espacio en el que nuestras respuestas dejan de ser las mismas, producto de la reflexión y el aprendizaje que obtenemos al observar- nos y asumirnos de manera consciente y responsable.

Cuando llegamos a observar agudamente nuestros comportamientos son muchas las cosas en las que caemos en cuenta… tanto, que es inevitable y casi seguro que entremos en conflicto con nosotros mismos. A veces nos asusta mirarnos, desnudar el alma frente a nuestros ojos como que si fueran ellos un espejo es algo a lo que tememos, por eso se dice que hacer eso es un acto de valentía, pues no todos somos capaces de hacerlo….tenemos miedo de ver lo que hay del otro lado de nosotros.

Al principio libramos una batalla con negaciones y justificaciones sobre lo que hacemos y quienes somos, no queremos escuchar ni mucho menos aceptar que dentro de nosotros tenemos también a las tinieblas, la oscuridad, la maldad conviviendo con nosotros y haciendo de las suyas… hacemos de todo para convencernos de que somos absolutamente buenos y que son los demás los que atentan con su maldad en nuestra contra!

Pero como tenemos voces internas, a veces alguna de ellas nos hace eco… y esa nos hace dudar de nuestra absoluta bondad, o razón…Es allí cuando comienza el principio de la alquimia a dar sus pasos…Noche y día vamos al espacio experiencial a observarnos y darnos cuenta cómo es que estamos actuando, cómo estamos haciendo y sobre todo cómo es que estamos siendo…

En muchos momentos la confusión aparece liberando angustia en nosotros, angustia por no saber cómo es que tenemos que ser, hacer o actuar, la duda se apodera de quienes somos…es allí cuando nos encontramos irremediablemente en la nada, en el vacio, a solas con nosotros, desnudos en el infierno viendo, sintiendo, percibiendo en su máxima expresión toda nuestra oscuridad, nuestras tinieblas, nuestra falta de luz, nuestra falta de poder… allí estamos totalmente vulnerables y desasistidos!

Una vez en ese espacio, algo es necesario hacer para salir del trance…Si, es necesario aceptar, aceptarnos tal cual, aceptar que lo que estamos viendo es nuestro también… y aceptarlo significa abrazar con compasión eso que vemos y no cuestionarlo, no enjuiciarlo… solo aceptarlo…

Otra cosa importante es saber que lo que vemos en el trance, son nuestros egos traducidos en: emociones llamadas negativas, pensamientos adversos que producen reacciones y sentimientos incómodos, sufirimientos; producto de nuestra experiencia y que nos ocurren para algo… Así mismo es necesario saber que si entramos en ese trance es porque estamos en un proceso de transformación en el que la vida nos pone para renacer, y trasmutar cosas en nosotros, es cumplir con la alquimia en nosotros… es para escoger vivir de otra manera… es una oportunidad!

Otra cosa que debemos considerar es que lo que surge en esa oscuridad no va a desaparecer nunca… siempre estará con nosotros va a acompañarnos durante toda nuestra existencia, solo que ahora tenemos más conciencia de ello y podemos no ser victima de eso, sino más bien ser nosotros los que elegimos conscientemente como nos vamos a vivir eso que surge de nosotros cada vez que aparezca: nuestra oscuridad.

Finalmente despues del proceso lo que queda es una gran lección aprendida, un nivel de madurez y de comprensión altísimo, una capacidad de decidir y elegir con conciencia también altos, resultamos más dueños de nosotros mismos con un conocimiento de si mismos potenciado, nuestro poder personal se incrementa, por lo tanto la seguridad, la confianza y los valores se consolidan… comenzamos a vivir más en equilibrio buscando los puntos medios y evitando los extremos generando bienestar, amamos más intensamente todo, abrazamos a la vida, disfrutamos de más libertad… definitivamente comenzamos a vivir más plenamente!

Derivemos de lo dicho los pasos para generar alquimia en nosotros y producir las transformaciones y cambios que estamos necesitando en nuestra vida. Vayamos al infierno a quemar nuestra osuridad y generemos alquimia en nosotros, transformemos nuestras tinieblas en luz!

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Agradecida de tu comentario... aprendo de ello y me hace crecer...